Tailandia es un país emocionante, con mucha gente y bullicio pero también con mucha naturaleza salvaje. Al venir desde la otra parte del mundo, todo es muy diferente a lo que estás acostumbrado; la cultura, la comida, los edificios, los paisajes, los animales, etc… así que aburrirse es imposible.
También ofrece diferentes posibilidades de viaje, tanto si quieres viajar de mochilero con poco presupuesto, como si quieres hacer un viaje de lujos y tranquilidad.
Nuestro viaje duró dos semanas, y como sabíamos que era imposible conocer bien el país en tan poco tiempo, decidimos centrarnos en sólo 2 lugares, un poco del norte, y las islas del sur. En este artículo nos centraremos en el norte del país, con lugares como Chiang Mai y el Parque Nacional de Doi Inthanon.
Si te interesa conocer parte del sur y sus playas, tenemos este otro artículo del Parque Nacional Marino de Tarutao y la pequeña isla de Koh Lipe.
En cualquier viaje es muy importante tener un buen seguro de viajes por los imprevistos que puedan pasar, nosotros tenemos contratado con IATI un seguro con buenas coberturas para nuestra furgo, nosotros y nuestro perro. Te dejamos un enlace en el banner de abajo con un 5% de descuento en cualquier seguro por ir de nuestra parte.
Chiang Mai es la ciudad más grande del norte y la segunda más grande de Tailandia detrás de Bangkok. Está ubicada en la ribera del río Ping en una parte muy montañosa del país.
Pasear por la ciudad es el primer atractivo, la cocina callejera que inunda las calles de multitud olores, los manojos de cableado eléctrico que te hacen dar gracias de no ser electricista tailandés, el «caos ordenado» en el asfalto de las miles de motos y tuk-tuks que circulan de manera alocada pero a su vez todo está de manera ordenada, de ahí el «caos ordenado»… Y por supuesto, sin olvidar la enorme cantidad de templos budistas que alberga la ciudad.
Nuestro vuelo salió de Barcelona haciendo escala en Moscow, y aterrizó en la ciudad de Bangkok, en el aeropuerto internacional Suvarnabhumi (BKK). Desde Bangkok cogimos un vuelo interno con destino Chiang Mai. Los vuelos internos suelen salir desde otro aeropuerto diferente al internacional y que también está dentro de la ciudad de Bangkok, el aeropuerto Don Mueang (DMK).
El trasbordo lo hicimos en un autobús gratuito que conecta los dos aeropuertos. Para poder cogerlo solamente tienes que enseñar los billetes de los dos vuelos a la persona que está en la parada del autobús, fuera de la terminal.
Como ya hemos dicho, hay muchísimos templos en la ciudad, concretamente más de 300. Sería imposible y un poco monótono visitarlos todos, así que hemos elegido nuestros favoritos.
El primero de la lista no está dentro de la ciudad pero sí muy cerquita.
Para visitar algunos monumentos o realizar excursiones, encontrarás agencias que ofrecen tours por toda la ciudad, y en la mayoría, éstos incluyen la comida y el transporte.
No vamos a dar consejos de moral a nadie, pero recuerda que en todos los espectáculos con animales salvajes, la vida de estos animales es una tortura constante. Si no pagas para verlos ayudarás a evitar una vida de condena y sufrimiento. Una foto para el recuerdo con un animal salvaje, significa toda una vida de esclavitud para el animal.
En la semana que pasamos en la ciudad, contratamos dos excursiones. Una fue la visita al parque Nacional Doi Inthanon, que a su vez allí se encuentra la montaña más alta de Tailandia, el Monte Inthanon con 2.565m y las dos Pagodas gemelas. Te lo contamos un poco más abajo o más en detalle en este otro artículo dedicado a Doi Inthanon.
La segunda excursión fue un poco más aventurera. Nos aventuramos a contratar una excursión en kayak descendiendo por el río Ping. La excursión fue de día completo, con guías profesionales, traslado de ida y vuelta al hotel, comida y todo el material necesario y además un cursillo rápido de cómo manejar el kayak en situaciones de descenso por un río como éste, lleno de vegetación selvática.
La excursión nos costó sobre los 50€ por persona, y fue una experiencia única.
Nos encantó adentrarnos en la densa selva con el único ruido de los animales a nuestro paso, y desconectar por unas horas del bullicio de la ciudad. Eso sí, a pesar del cursillo que nos dieron antes de empezar, nos caímos unas cuantas veces al agua, quizás porque éramos un poco novatos o porque hacía calor y queríamos darnos un chapuzón, nunca lo desvelaremos .
Aún así, te recomendamos mucho hacer esta excursión!
Todas las noches en la ciudad hay un mercado nocturno donde puedes comprar productos típicos, comida callejera ¡incluidos insectos! y muchas otras cosas. Al ser una zona muy turística el regateo es una práctica habitual, así que a la hora de comprar el vendedor te pondrá un precio en una calculadora y a partir de ahí empieza el regateo. No te pases de list@ e intentes regatear demasiado 🤣
Puedes aprovechar el paseo nocturno para visitar algunos templos iluminados
No podíamos venir a Tailandia y no probar los famosos masajes tailandeses. Nos dimos solamente uno en todo el viaje y fue más que suficiente. Para ser sinceros no fue una experiencia nada placentera.
Quizás no estamos acostumbrados a este tipo de masajes o quizás fue porque teníamos agujetas del día del kayak, pero cuando acabó el masaje, teníamos la sensación de que nos habían dado una paliza dos pequeñas tailandesas. No volvimos a probar la experiencia aunque la recordamos con risas y dolor a la par.
La cocina tailandesa es una de las cosas que más nos gustó de Tailandia. Si te gusta el picante disfrutarás mucho de la gastronomía, y si no eres muy fan del picante, siempre puedes pedir que te pongan poco o directamente no poner.
Restaurantes hay de todo tipo, nosotros te recomendamos probar la comida callejera o los restaurantes un poco alejados de las zonas más turísticas, a los que va la gente local. A pesar de ser sitios más «cutres» por así decirlo, la comida está más rica. No te asustes si en los puestos de comida callejera te sirven la comida en bolsas de plástico, allí es totalmente normal.
Nosotros encontramos uno entre unas callejuelas y aunque era difícil entendernos porque no sabían nada de inglés, la comida estaba riquísima y fue más barato que otros restaurantes turísticos a los que fuimos.
Se encuentra situado a 60km de Chiang Mai y el parque alberga la montaña más alta de toda Tailandia, el Monte Inthanon con 2.565m de altura. Se le conoce como el techo de Tailandia y desde aquí tendrás las mejores vistas y varios lugares que visitar.
Para llegar puedes hacerlo por libre en transporte público o alquilando una moto o un coche. Otra opción es contratar uno de los tours desde la ciudad de Chiang Mai, en los que te incluirán el transporte, un guía y la comida. Esta es la opción que escogimos nosotros.
Como ya hemos dicho, en el parque hay diferentes lugares que visitar. En nuestra excursión visitamos las Pagodas Gemelas, las cascadas Wachirathan y Sirithan, un mercado local (muy hecho para los turistas, todo sea dicho) y también hicimos el trekking llamado Kew Mae Pan.
Te lo contamos todo más detallado en este otro artículo.
Este viaje a Tailandia fue un primer contacto con el país, esperamos poder visitarlo en otra ocasión con mucho más tiempo, quizá dentro de nuestro gran viaje en camper, en el que nos encontramos inmersos.
Sea así o de otra forma, sabemos que tenemos que volver, porque nos quedaron muchos rincones por descubrir, que no nos queremos perder. Tailandia realmente es un país apasionante.
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